Mal partido que supuso la segunda derrota de la temporada. El equipo no supo sacar provecho a la victora de la anterior jornada como refuerzo positivo y, tras una semana de entrenamientos muy irregulares, estos se trasladaron a un partido en el que nunca llegamos a ser nosotros mismos: en ataque, sin ser capaces de conseguir primeras ventajas al no correr con orden, lo que se sumó a un 5×5 sin ningún tipo de rigor: perdidos cada vez que jugábamos en pista delantera, con unos espacios y un juego sin balón que nada tienen que ver con lo trabajado, unas tomas de decisiones que brillaron por su ausencia y una pobre calidad de Bloqueo. En defensa, pese a los 67 anotados por el equipo rival, la historia fue similar. O nos damos de una vez cuenta de dónde estamos y de qué realidad partimos, o esta será la tónica habitual de cada fin de semana.